El lunes por la mañana, después de desayunar en la cafetería del hotel, Manuela, Elena y yo salimos preparados a conocer la ciudad. Zaragoza a pesar de ser una ciudad grande se puede ver relativamente rápido, o esa es la impresión que nos dio. Seguro que tiene muchas más cosas que ver de las que nos dio tiempo o éramos conscientes, pero por resumir, los principales atractivos son:
- La Catedral-basílica de Nuestra Señora del Pilar
- La Catedral del salvador de Zaragoza
- El Puente de Piedra
- La Lonja
- La Plaza de los Sitios
- Palacio de la Aljafería
Por falta de tiempo, no visitamos ni el Patio de la Infanta ni el Parque de José Antonio Labordeta. Tampoco pudimos visitar ninguno de los restos romanos que se encuentran en el casco histórico (termas, foro, teatro y puerto fluvial), por encontrarse cerrados el lunes. Y por último, tampoco llegamos a entrar en la Catedral de San Salvador de Zaragoza porque no nos habíamos informado de si merecía la pena y no quisimos pagar la entrada de 8 euros. Mas tarde, la guía del Palacio de la Aljafería nos lo recomendó.