22 septiembre, 2023

Safari en Kenia – Samburu, Nakuru y Masai Mara

Viajeros: Familia de Elena y Carmen (amiga la familia)
Hospedaje: 67 Airport Hotel  (Nairobi), Sarova Shaba Lodge (Samburu), Ziwa Bush Lodge (Nakuru), Mara River Camp (Masai Mara) y Hotel Sands at Chale Island (Mombasa)
Días: 12 días 
Transporte: Avión y furgoneta
Ciudades: Nairobi, Parque Samburu, Parque Nakuru, Parque Masai Mara y Mombasa
Fecha: agosto de 2018

Todo el mundo que visita el África subsahariana vuelve enamorado del continente y suele repetir. Yo no fui una excepción y sin duda tengo claro que después de este viaje haré muchos safaris más por África. 

El itinerario que hicimos fue el siguiente:

Día 1: Vuelo Málaga – Estambul
Día 2: Visita rápida a Estambul y vuelo a Nairobi
Día 3: Traslado al Parque Samburu y safari de 2 horas por la tarde
Día 4: Safari en Parque Samburu
Día 5: Traslado al Parque Nakuru y safari de 2 horas por la tarde
Día 6: Traslado al Parque Masai Mara
Día 7: Paseo en globo y safari en Parque Masai Mara
Día 8: Safari en Parque Masai Mara
Día 9: Traslado a Nairobi, vuelo a Mombasa y traslado al hotel
Día 10 y 11: Playa en Chale Island
Día 12: Playa en Chale Island, traslado a Mombasa, vuelo a Nairobi, vuelo a Estambul y vuelo a Málaga.

Día 1 y 2: Estambul
En principio nuestro viaje estaba organizado para nada más llegar a Estambul, hacer la conexión a Nairobi, pero por un cambio de horario en los vuelos de Turkish Airlines tuvimos que volar un día antes. La aerolínea nos pagaría el hotel en la capital otomana y el visado de turista que eran $25 por persona. De esta manera, no tuvimos problemas para coger el vuelo a Nairobi y además teníamos unas horas para visitar Estambul.

Nos quedamos esa noche en el Hotel Mercure, cerca del Aeropuerto Internacional Atatürk. A la mañana siguiente cogimos el shuttle al aeropuerto y contratamos un servicio de taxi que nos llevara a Sutanahmet y nos recogiera en el mismo sitio a las 16:00 para coger el vuelo a las 19:35. El servicio de taxi para los 6 nos costó $50 ida y vuelta.
 
Otro dato importante es que en el Aeropuerto Internacional Ataturk, hay consigna de maletas por 36TL/maleta. Así que dejamos allí las maletas para poder visitar la ciudad con comodidad, y poder ir directos al aeropuerto a la vuelta. 
Como sólo teníamos unas 6 horas, visitamos lo siguiente: Mezquita Azul, Hagia Sofía, Basílica Cisterna, Puerta y jardín del Palacio Topkapi, Pequeña Hagia Sofía, Gran Bazar, Mezquita Süleymaniye, Bazar de las Especias y la zona de Eminönü.
Para más información sobre Estambul recomiendo mi Guía de Estambul.

A las 16:00 nos subimos al taxi en una calle que estaba detrás de la Mezquita Azul, y aquí empezó nuestro periplo. A las 17:00 habíamos avanzado unos 10 metros y cuando finalmente salimos del atasco y llegamos al aeropuerto, tuvimos que correr para llegar a la puerta de embarque a tiempo.

Cogimos el taxi por la comodidad del servicio, pero no dejaré de recomendar el metro para moverse del aeropuerto a la ciudad y viceversa. Es un servicio bastante rápido (45 minutos a Sultanahmet) y nunca tendrás el problema del terrible tráfico de Estambul. 

Después de 6 horas y media de vuelo llegamos a Nairobi sobre las 02:00 de la madrugada, donde nos esperaba un empleado del 67 Airport Hotel para trasladarnos al mismo. Sin embargo, se sorprendió al ver que eramos 6 personas y que él solo había traído un turismo. Por tanto, tuvimos que esperar 45min para que llegara otro empleado con un segundo coche. El hotel es bastante cutre, aunque como lo queríamos para dormir unas pocas horas y salir temprano hacia Samburu, no nos preocupaba.

Día 3: Traslado a Samburu y «safari por la tarde»
Aquí es cuando empieza nuestro safari y los problemas con la agencia contratada desde España (Udare). La contratamos debido a las buenas reseñas en la web. Nada más subirnos a la furgoneta pudimos comprobar que era muy antigua y no presentaba las mejores condiciones, no solo estéticas sino de comodidad y potencia. Todos los vehículos, incluidos autobuses y camiones nos adelantaban por carreteras de un solo carril para cada sentido y además, no tenía aire acondicionado. 

 

Al menos el guía de habla española y origen tanzano parecía muy simpático y atento, del mismo modo que el conductor de habla inglesa. Y aunque muchas de las cosas organizadas por la agencia fueron muy mejorables, como iré contando, el viaje nos encantó a todos, vimos muchísimos animales, paisajes impresionantes, los hoteles eran de diez y lo pasamos muy bien.

Después de un trayecto de 9 horas a 32 grados llegamos al Parque Samburu a las 16:30, parando a comer un trocito de pollo en un KFC (todas las comidas incluidas por la agencia). De modo que como el parque cerraba a las 18:00 según nuestro guía, hicimos un corto safari de 1,5 horas. Como veis he puesto el «safari por la tarde» del título entrecomillado, ya que 1 hora y media de safari no me parece que sea una tarde entera viendo animales, como esperábamos. 

En el trayecto Nairobi-Samburu, que va de sur a norte, cruzamos la línea del Ecuador. Aquí, normalmente, se hace una pequeña parada para que un keniano que se hace llamar Dr. Wilson, te explique el Efecto Coriolis, por el que, debido a la rotación de la tierra y la gravedad, el agua gira en el sentido contrario a las agujas del reloj en el hemisferio norte y en el sentido de las agujas del reloj en el sur.

En Samburu nos hospedamos dos noches en el Sarova Shaba Lodge, que nos sorprendió gratamente. Los bungalows eran de piedra y madera, muy amplios y bonitos, con grandes camas y mosquiteras. Se encuentra a la orilla de un río lleno de cocodrilos, donde se puede disfrutar de un bonito atardecer. Además, en este lodge vivía una enorme manada de monos vervet, que solían aparecer por la mañana y por la tarde.

Día 4: Parque Samburu
Samburu es un parque distinto tanto por su flora como por su fauna. El paisaje es agreste y desértico, en ocasiones atravesado por el serpenteante río Ewaso Ngiro, que deja a su paso una estrecha franja de oasis. Prácticamente los únicos árboles que se ven en este parque son acacias y palmeras. Muchos de los animales que se pueden encontrar en este parque son distintos: jirafa reticulada, cebra de grevy y el gerenuk, entre otros muchos que también puedes encontrar en otros parques. Sin embargo, no es un parque donde encuentres manadas de animales y estos se vean continuamente (como en Masai Mara), aquí hay que currárselo y buscarlos. Por este motivo, creo que es una buena opción para visitarlo el primero.

En este parque es donde vimos a una hembra guepardo con sus cachorros, majestuosas jirafas reticuladas, elefantes, oryx, gerenuks o gacelas jirafa, antílopes de agua, gacelas de Thomson, gacelas de Grant, impalas, mandriles y facoceros.

El itinerario de este día consistía en safari por la mañana, comida y descanso en el hotel y safari por la tarde. Después de 6 horas de safari por la mañana, llegando al hotel para comer, el guía nos preguntó si estábamos interesados en visitar una aldea Samburu para conocer como vivía la tribu, pagando $20 por cabeza. Dijimos que no nos interesaba, y en consecuencia nos respondió que en ese caso, el conductor había trabajado 6 horas seguidas y que después de comer no habría más safari, que nos quedaríamos en el lodge descansando. Yo entiendo que tanto el guía como el conductor se llevan una comisión por llevar gente a la aldea Samburu y que no les gustó que no quisiéramos ir, pero lo que no pueden hacer el vulnerar el contrato de esa forma (otro punto negativo más para la agencia).

Día 5: Traslado al Lago Nakuru y «safari por la tarde»
Salimos a las 7 de la mañana de Samburu, para llegar al parque del Lago Nakuru sobre las 15:30 y comenzar a hacer el safari a las 16:00, después de parar a comer un picnic preparado por el lodge. De ahí que vuelva a entrecomillar el «safari por la tarde». 

Aquí el paisaje cambia de forma espectacular con respecto al parque anterior, es muy verde y húmedo, con una vegetación frondosa y una luz diferente. Se trata de un pequeño parque de unos 200 km2 alrededor de un lago cuyo tamaño varía de 5 a 45 km2 dependiendo de las lluvias. El principal atractivo de Nakuru es el rinoceronte blanco, pero ofrece mucho más, como búfalos, hienas, flamencos rosas, jirafas de Roschild, cebras comunes, cigüeñas de pico amarillo, pelícanos, damanes y multitud de otras aves y mamíferos.

El Parque Nakuru, en mi opinión es muy bonito y lo disfrutamos mucho, pero al estar todo vallado da un poco la sensación de ser menos salvaje que los otros grandes parques.

Después de un paseo viendo muchísimos animales, paramos cerca del lago para bajarnos del vehículo y poder disfrutar de la fantástica vista.

Como en teoría el parque cierra a las 18:00, nuestro safari duró 2 horas, y no pudimos quedarnos a disfrutar del atardecer como nos hubiera gustado. 

Nos trasladaron al hotel Ziwa Bush Lodge, a una hora por carretera del parque, pero que nos encantó. Se trata de un hotel con pequeñas cabañas de hormigón muy chulas, y un gran espacio con comedor y salón con chimenea muy bonito. La comida estaba espectacular y el servicio muy atento. Una vez allí nos enteramos que en el mismo terreno hay un orfanato regentado por el mismo dueño del hotel, que recoge niños de la calle y les da una oportunidad para estudiar y vivir decentemente. Además, a aquellos más aplicados y que estudian una carrera relacionada, les da trabajo en el lodge.

Día 6: Traslado a Masai Mara
Así es, según el itinerario teníamos programado un safari por la tarde en Masai Mara, pero no lo pudimos hacer por llegar al parque a las 17:00, otra vulneración más del contrato de la agencia. 

El camino a Masai Mara es largo y tortuoso. Por un lado tienes la oportunidad de ver como viven los kenianos a lo largo de la carretera, las condiciones de pobreza y al mismo tiempo la sonrisa de los niños cuando simplemente les saludas con la mano. Te hace pensar, los lujos con los que haces el viaje y el contraste con la población local. Al final terminamos dando mucha ropa y zapatos por la ventanilla del coche, que aunque era un gesto insignificante podía hacer feliz a algunos niños por un día.

Como ya hemos dicho, salimos de Nakuru a las 08:00 y llegamos al Mara River Camp a las 17:00, con lo que nos quedamos en el campamento el resto de la tarde y noche sin poder hacer safari ese día. El Mara River Camp está genial, consiste en unas tiendas de lona muy amplias, equipadas con todo tipo de lujos, baño, armario, gran cama de matrimonio, etc. Se encuentra a la orilla del Río Mara, repleto de ruidosos hipopótamos. Además en el mismo recinto del campamento hay monos de vervet y dyk dyks. 

Día 7 y 8: Safari y paseo en globo por Masai Mara
La mañana del séptimo día nos recogió la compañía de globo Skyship, a las 5:30 de la mañana para hacer el paseo en globo. Es una experiencia carísima ($400/pax) pero totalmente recomendable, a nosotros nos encantó ver el amanecer desde el globo, ver a distintos animales desde las alturas y sobre todo, la experiencia del vuelo y el movido aterrizaje. 

Después del paseo en globo y de un divertido aterrizaje en el que la cesta dio varios botes por el suelo como podéis ver en el siguiente video, nos llevaron en unas camionetas a una parte de la sabana donde tenían todo preparado para un delicioso desayuno, con huevos, pan, embutido, donuts, yogur, crepes, gofres, café, zumos, etc. No sólo la comida estaba muy buena si no que el entorno era inmejorable, en medio de la sabana rodeados por 16 jirafas masai. 

Después de desayunar fuimos a la entrada del Parque Narok, donde nos esperaban nuestra destartalada furgoneta con el guía y el conductor, para así iniciar el safari. Ese día hicimos safari durante toda la mañana, pero como habíamos madrugado mucho fuimos a comer y descansar al campamento. Por la tarde, a eso de las 15:00 volvimos al parque para seguir con el safari. Masai Mara nos sorprendió por la gran cantidad de animales, vimos muchos más que en el resto de parques. Llegó un momento en el que cebras, impalas, gacelas de Thomson y antílopes de agua dejaron de llamarnos la atención, por la gran cantidad que veíamos.

Pero, al mismo tiempo, fue en este parque donde vimos por primera vez al rey de la selva. Y vimos hembras, crías y melenudos machos, en diversas ocasiones. Tuvimos la suerte de ver también a un grupo de leones comiendo los restos de lo que había sido un animal, en ese momento irreconocible.

Ya sobre las 18:00 empezamos a volver hacia la salida del parque para regresar al Mara River Camp, pero a medida que nos acercamos vimos muchos vehículos juntos atentos a 3 topis. Estaban esperando a que una leona, que estaba escondida en la maleza, iniciara su ataque. Sin embargo, después de 5 minutos, nuestro guía decidió que ya había trabajado suficiente por el día y que teníamos que irnos, ¡un desastre!. 

Al día siguiente cogimos unas cajas de comida que nos había preparado Mara River Camp para así poder pasar el día entero en el parque de safari. En esta ocasión fuimos más lejos, cerca de Serengueti, y fue ahí donde vimos por primera vez, no a uno, sino a miles de ñus. Se trataba de la Gran Migración, había filas de ñus y cebras por kilómetros. Un par de veces intentamos ver a los ñus y cebras cruzar el Río Mara, pero los muy cobardes se echaron atrás en ambas ocasiones. No pudimos ver los cocodrilos atacar a los precavidos ñus, lo que sí vimos, y olimos, fueron buitres y marabús alimentándose con los cadáveres de varios ñus en el río.

Sobre las 16:30 el guía decide que ya hemos hecho suficiente safari y volvemos al campamento. Eso sí, de camino nos preguntaron si queríamos visitar un poblado Masai por $20 por cabeza, e igual que con los samburus rechazamos la idea. Pero cuando llegábamos al campamento, vimos un mercado de artesanía masai y pedimos parar a mirar, negándonos tal posibilidad y diciéndonos que podía ser peligroso. 

Día 9: Traslado a Nairobi, Vvuelo a Mombasa y traslado a Chale Island
Regresamos a Nairobi para coger un vuelo doméstico a Mombasa, ya que queríamos pasar unos días de playa y relax después de tan cansado viaje. Al final entre el trayecto a Nairobi de unas 7 horas, el vuelo de 1 hora y el trayecto en taxi, previamente contratado, de 1 hora, llegamos al Hotel Sands at Chale Island por la noche. 

El hotel está super bien, ya que se encuentra en una isla privada a unos 600 metros de la costa, a la que se accede en tractor o lancha dependiendo de las cambiantes mareas. Como llegamos de noche, accedimos a la isla en tractor, ya que la marea estaba baja, fue toda una experiencia. 


Día 10 y 11: Relax en Chale Island
Por lo visto el mes de agosto no es el mejor para ir a las playas de Mombasa, pues estas están llenas de algas. Aparte de eso el agua tiene una temperatura templada y está muy limpia, la arena es de coral, blanca, y el hecho de que la isla sea privada hace que no te molesten los vendedores ambulantes como en otras playas a lo largo de la costa.

CONCLUSIÓN DEL VIAJE Y RECOMENDACIONES PARA UN SAFARI:

1- Mucho cuidado con qué agencia de safaris contratas desde tu país de procedencia. Asegúrate de que va a cumplir las expectativas. Pide fotografías de los vehículos y un itinerario detallado sobre horarios a cumplir. Nosotros tuvimos mala suerte con Udare Safaris, que resultó ser un desastre. El viaje lo vas a disfrutar de todas las maneras, pues te vas a enamorar de África y los parques y lugares que ves son maravillosos, pero eso no puede hacerte perder la conciencia de la calidad del servicio que has contratado.

2- Visitar distintos parques con características diferentes es un acierto. Podrás ver paisajes muy distintos y mayor variedad de animales.

3- Debes considerar el tiempo que pasarás en carretera, a nosotros nos pareció demasiado:

Nairobi-Samburu — 9 horas
Samburu-Nakuru — 9 horas
Nakuru-Masai Mara — 9 horas
Masai Mara-Nairobi — 7 horas

En total pasamos unas 34 horas en carretera entre parques, lo que nos pareció una salvajada. Quizás pueda ser más interesante hacer un día o dos menos de safari y con ese ahorro trasladarte en avioneta entre parques. Otra opción es mirar si compensa visitar otro país como Tanzania, cuyos parques están más cerca unos de otros. El problema con Tanzania es que el vuelo Málaga-Arusha era muy caro, pero existe la opción de volar a Nairobi, y de ahí coger una avioneta a Arusha por unos $250.

4- El safari en globo que dura unos 45 min, y que es muy caro ($400/pax) es una experiencia única y lo recomiendo totalmente.

5- El guía y conductor le dan mucha importancia a la propina que recibirán (lo recomendado son $20 al día a cada uno, pagadero al final del safari). Por eso, yo dejaría claro que dicha propina será mayor o menor dependiendo del trato recibido y las ganas de trabajar que estos tengan. El dejarnos una tarde entera en el lodge en vez de hacer safari o el volver al hotel porque deciden que es tarde cuando existe la posibilidad de ver a una leona cazar, no es lo que se espera de un guía.

6- Descansar en la playa tras el safari es una buena opción, sin embargo las playas de Mombasa en los meses julio, agosto y septiembre están llenas de algas y hay que tenerlo en cuenta para el que no le guste. ¡A mi no me importa!, de hecho el que haya algas es señal de que el agua está limpia.

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